Simple, ya no tengo a nadie. Ya no confió ni en mi sombra, ni quiero volver a confiar en que a alguien más, yo, le importe.
¿Soy la única que siente que su felicidad está lejos de su familia? No niego que puedan existir personas que me quieren, pero no tengo mas la certeza que su cariño sea puro y sin exigencias. Ya no más.
Creo que solo saliendo del nido cuanto antes, emprendiendo mi propio camino (no estoy segura si acompañada), comenzando una vida diferente podre estar completamente feliz.
Sé que lo que paso fue una prueba más para darme cuenta que nadie tiene la capacidad de amarte, valorarte, y hacerte sentir importante, de manera incondicional y sincera que Dios. Estoy segura que en este momento el único amor que siento es el que me brinda siempre de mi Padre Celestial.
Si me hubieran preguntado hace dos días sobre el amor, creo que les hubiera descrito mil y un tipos de este. Pero si me preguntan ahora solo, les diría que conozco y confió solo en un tipo de amor, El divino.
Me prometí a mí misma que no volvería a derramar ni una sola lagrima más, es por eso que escribo esto sabiendo que sobreviviré.